
El boca a boca suele ser la mejor propaganda para que un blog crezca. Bueno, un blog o cualquier otro producto telemático. Se le suele llamar a esto marketing viral y el blog de la chica de la que os voy a hablar hoy bebe un poco de eso. De eso y del hecho de que halla aparecido en televisión (en Sé lo que hicisteis...)
Eva se Desnuda es el blog de una estudiante de Ciencias Políticas. Pero este no es un blog cualquiera. Su intención es cuasirevolucionaria y tiene ciertos tintes heroicos: criticar a la política mediante la "exposición" de su cuerpo. Más concretamente: por cada decepción que se lleve en la campaña electoral, la muchacha se quitará una prenda de ropa. Vamos, un streaptease con mensaje subversivo. O al menos subversivo sobre el papel.
Me muestro bastante escéptico acerca de la finalidad de la iniciativa. La ausencia de críticas argumentadas la justifica Eva por el hecho de que cualquiera de sus compañeros de carrera, su vecina del tercero o hasta Raphel podrían hacerlo. Que va al grano es indiscutible, tanto como el hecho de que todo los vídeos se hayan grabado de una vez ("sabiendo" que la iban a decepcionar). Por eso me temo de que todo este asunto se tiña enseguida de vacuidad. Aunque tal vez eso sea un error de partida.
De todas formas, la iniciativa, con todo, me parece loable. Para empezar es una crítica más allá de los argumentos. Cuando los errores de los partidos políticos empiezan a tornarse sempiternos y, en consecuencia, las críticas hacia esos errores se tornan sempiternas, parece necesario un ir más allá cuando la decepción se muestra inmutable. Eva lo hace.
Por otro lado, la iniciativa en sí misma es una confrontación directa ante la moral puritana de ciertos sectores dominantes de la sociedad. Los viejos tabúes, las caducas normas no escritas, el convencionalismo insulso e injustificado, todo eso, es el foco de crítica paralela y sumergida bajo el leivmotiv principal. Si cada vez más filósofos y científicos consideran la mente (sea lo que sea) como algo emergente de la fisiología humana, no como una esencia desligada del cuerpo, sino precisamente manifestada en el cerebro y en el cuerpo en toda su totalidad, parece razonable y lícito que el cuerpo se convierta en una herramienta más de crítica. Para mi esto es clave y es lo que dota de sentido a la idea.
Habrá quienes opinen que esto no es más que un simple intento cutre de llamar la atención. Autobombo. Y es posible que quienes piensen así tengan razón. Yo, de hecho, ya he manifestado que me muestro un tanto escéptico ante la situación. Quizá, después de todo, la idea no sea más que un engaño. Pero prefiero pensar, ante la ausencia de datos, que las cosas no vayan a concluir así. Eso sólo lo sabremos con el tiempo.
Mientras tanto, nos queda su sensual y precioso cuerpo como símbolo de una idea por la que merece luchar. Ahí va el enlace a su blog. Que lo disfrutéis.